el hombre hizo el fuego para calentarse
y nosotros nos hicimos para quemarnos
para llorarnos
para besarnos
para quedarnos sin aire y respirarnos
llueve sobre tu cuerpo desnudo tendido
y es un milagro
como el primer fuego
como el próximo paso
que darán estos cuatro pieses desesperados
sobre las brasas del mundo.
miércoles, 17 de abril de 2013
La santa rabia
La venezuela es una mujer que se volvió loca
tuvo dos padres pero no reconoce a ninguno
el primero la violaba y la casaba con maridos que nunca quiso
y que la volvieron mestiza y castellana
y le decía: tú te inclinas sobre la tierra, mía la cosecha y la fortuna
el segundo también la violaba y la casaba con maridos que no quieren a nadie
y le decía: solo sirves para limpiar lo que yo dejaré
después de haberme saciado del fruto de tus entrañas
la venezuela se volvió loca
"mi único padre es Simón Bolívar", dice
"en el parto de mí misma yo
entré al mundo con un hijo multitudinario en el vientre
que le puso nombre a todo lo que existe
en las manos traje un pan robado para la historia
y ya abría los ojos a la muerte sin pestañarle
porque cuando me nací
la gaita ya sonaba muy fuerte con el tambor
me revolvía la sangre y me estalló el dolor"
tuvo dos padres pero no reconoce a ninguno
el primero la violaba y la casaba con maridos que nunca quiso
y que la volvieron mestiza y castellana
y le decía: tú te inclinas sobre la tierra, mía la cosecha y la fortuna
el segundo también la violaba y la casaba con maridos que no quieren a nadie
y le decía: solo sirves para limpiar lo que yo dejaré
después de haberme saciado del fruto de tus entrañas
la venezuela se volvió loca
"mi único padre es Simón Bolívar", dice
"en el parto de mí misma yo
entré al mundo con un hijo multitudinario en el vientre
que le puso nombre a todo lo que existe
en las manos traje un pan robado para la historia
y ya abría los ojos a la muerte sin pestañarle
porque cuando me nací
la gaita ya sonaba muy fuerte con el tambor
me revolvía la sangre y me estalló el dolor"
lunes, 18 de febrero de 2013
Sin titulo veinte.
Abrí todos los diarios del dia del ocaso
del continente de la lluvia de los mares
no te encontré
ni una ilusión amarga
sentí otra vez
camino al trabajo
dejé que el humo del cigarrillo me maree
para recibir el golpe de tu cuerpo desnudo
en la cara
en el recuerdo
en tus ojos apagados
sin niños sin sombras ni sombreros azules
el mundo encerrado en la habitación
sin estrellas
así andaré tras el rumor
de tus pasos en la noche
cuando me dejes solo
con el capitalismo.
lunes, 9 de abril de 2012
24 de marzo
A veces cierro los ojos
y la encuentro
a la amante ídola
la estudiante crítica suelta con el sol en la cara
la docente que no duerme y madura el cuerpo y la mirada
la guerrillera inocente dura
a la oscura perdida tímida arrebatada
la estrella que no está
pero brilla
aún así la que falta
es la hija del abuelo
entrando a la casa con la luz del mediodía
con sus manos hermanas
con un rumor de multitudes populares
en la no tan fría avellaneda
otras veces no la hallo
toco su olvido como desde
una lejana orilla de la sangre
sumisa y en silencio
(cada tanto tenemos pesadillas con sus verdugos
haciendo golpear el martillo
sobre un estrado que era una mesa de torturas).
cuesta decirle
que sigue el país custodiado por la muerte
sólo que se sacó las botas
y todavía hay hijos descalzos
que buscamos la dignidad
pero a veces encontramos peros
y otras palos
y pedirle
que los destroce con la fuerza de los millones de besos
que nos obligaron a guardarnos
que descanse
que nosotros no descansaremos
y que aquí en mi corazón hice brotar una rama
por si acaso aún vuela como un pájaro y quiere bajar
a traerme algún secreto.
y la encuentro
a la amante ídola
la estudiante crítica suelta con el sol en la cara
la docente que no duerme y madura el cuerpo y la mirada
la guerrillera inocente dura
a la oscura perdida tímida arrebatada
la estrella que no está
pero brilla
aún así la que falta
es la hija del abuelo
entrando a la casa con la luz del mediodía
con sus manos hermanas
con un rumor de multitudes populares
en la no tan fría avellaneda
otras veces no la hallo
toco su olvido como desde
una lejana orilla de la sangre
sumisa y en silencio
(cada tanto tenemos pesadillas con sus verdugos
haciendo golpear el martillo
sobre un estrado que era una mesa de torturas).
cuesta decirle
que sigue el país custodiado por la muerte
sólo que se sacó las botas
y todavía hay hijos descalzos
que buscamos la dignidad
pero a veces encontramos peros
y otras palos
y pedirle
que los destroce con la fuerza de los millones de besos
que nos obligaron a guardarnos
que descanse
que nosotros no descansaremos
y que aquí en mi corazón hice brotar una rama
por si acaso aún vuela como un pájaro y quiere bajar
a traerme algún secreto.
sábado, 18 de febrero de 2012
María
ella me crece
y brilla de mí
como una aurora de la tierra.
y cuando hacemos el amor
ella pisa firme como si sus pies
caminaran sobre el agua.
así nos amamos
nuestra saliba moja el mar
allá donde se acerca al horizonte
todo el día es
crepitar como el sol
y seguir en viaje
hemos olvidado las horas que la muerte nos roba
porque hemos olvidado a la muerte
de otras cosas temblamos
mas calientes, más húmedas
ella me crece y brilla de mí
como una aurora de la tierra
donde a la sed de nuestros cuerpos han clavado.
y brilla de mí
como una aurora de la tierra.
y cuando hacemos el amor
ella pisa firme como si sus pies
caminaran sobre el agua.
así nos amamos
nuestra saliba moja el mar
allá donde se acerca al horizonte
todo el día es
crepitar como el sol
y seguir en viaje
hemos olvidado las horas que la muerte nos roba
porque hemos olvidado a la muerte
de otras cosas temblamos
mas calientes, más húmedas
ella me crece y brilla de mí
como una aurora de la tierra
donde a la sed de nuestros cuerpos han clavado.
miércoles, 28 de diciembre de 2011
Quererse
a veces
de la noche
caen goteras
sobre mi corazón
y la tristeza trata de explicarse.
-no te asustes-
dame de tu silencio para comer
llévame entre tu dulce caminar
a los campos abiertos
donde bailaremos
tomaremos vino
o de vuelta al barrio
o adónde sea que haya un compañero
y destrozaré lo que me sobra
para que me ilumines otra vez.
de la noche
caen goteras
sobre mi corazón
y la tristeza trata de explicarse.
-no te asustes-
dame de tu silencio para comer
llévame entre tu dulce caminar
a los campos abiertos
donde bailaremos
tomaremos vino
o de vuelta al barrio
o adónde sea que haya un compañero
y destrozaré lo que me sobra
para que me ilumines otra vez.
jueves, 22 de diciembre de 2011
Querer
cada mañana es un trajín de sudores puros
la gris ciudad que trabaja se viste
con calores recién amanecidos
tibios como la piel de un niño
ya buscó en la noche
los ríos violetas
el sabor de los vientos
el descanso de lo que se hizo para el bien
y para el mal de los hombres
y yo quiero
ser digno de sus piernas
como pan recién nacido
en la boca del pueblo.
la gris ciudad que trabaja se viste
con calores recién amanecidos
tibios como la piel de un niño
ya buscó en la noche
los ríos violetas
el sabor de los vientos
el descanso de lo que se hizo para el bien
y para el mal de los hombres
y yo quiero
ser digno de sus piernas
como pan recién nacido
en la boca del pueblo.
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